La piedra natural en la decoración en 2023: opinan los interioristas

Teresa González Díez

teresa.litosweb@gmail.com

 

Para conocer el papel que juega en la actualidad la piedra natural en el mundo de la decoración, hemos hablado con seis interioristas en España a los que hemos preguntado por las actuales tendencias a la hora de utilizar piedra natural en los proyectos de decoración e interiorismo. Hemos querido saber también los criterios que emplean a la hora de elegir entre piedra natural y porcelánico y, por último, les hemos pedido que nos digan cuál es su piedra natural favorita.

Estas han sido sus respuestas:

 

Javier Baldrich, COTONETBOIS

En los últimos tiempos, hemos presenciado el resurgimiento de la piedra natural como un elemento clave en el diseño de interiores y la decoración. Las nuevas tendencias han llevado a una mayor apreciación de la belleza y la versatilidad de la piedra natural, que se refleja en su uso en una variedad de estilos, desde lo rústico y tradicional hasta lo moderno y minimalista. También creemos que son tendencia los despieces de piedra natural mezclando otros materiales como madera o latón, creando de esta manera diseños únicos para cada proyecto. Además, la saturación de oferta de materiales sintéticos, creemos que nos conduce a un incremento del interés por las piedras exóticas y únicas, así como por su aplicación en formas innovadoras, como revestimientos de paredes, encimeras, suelos y elementos decorativos.

Asun Antó y Javier Baldrich. Fotografía: Juan Martín para Casa Decor

 

La versatilidad del material nos permite llevarlo a todas las estancias de la casa, para darle importancia a la encimera de la cocina o a los suelos, para revestimiento de cuartos de baños o en zonas de salón para revestir chimeneas, paredes, mesas o suelos. Es cierto que no podemos revestir en exceso con piedra natural nuestras estancias, tenemos que definir dónde va a lucir más el material y combinarlo con materiales cálidos como la madera o tonalidades que nos resulten acogedoras.

Siempre preferimos elementos naturales en nuestros proyectos, pero el cliente tiene que estar dispuesto a renunciar a la facilidad de conservación de los materiales sintéticos y pagar un precio más elevado, no en todos los casos se le da prioridad a lo natural y pesa más la practicidad y precio, lo mismo pasa con la madera natural o sintética.

La Cuarcita Paraná de Cupastone acabamos de ponerla en el último proyecto de Casa Decor y nos encanta, por su textura, colores y sutileza en las vetas y tonalidades. Es un material muy resistente comparado con otras piedras naturales, su resistencia a los arañazos y poco mantenimiento hace que para nosotros sea un material muy fácil de poner.

 

Gio Duarte, GIO DUARTE ARQUITECTURA

Como un elemento imperecedero, que nos remonta a la antigua Grecia y el renacimiento italiano, la piedra natural siempre está en el "top five", materiales que no puedes dejar de usar al realizar un proyecto de interiorismo. Todo depende del lugar donde lo coloques, de la creatividad del interiorista y la destreza del marmolista, para que éste destaque como una joya preciosa. En la actualidad está la tendencia de adquirir bloques enteros de este material natural y trabajarlo para crear piezas monolíticas como bañeras, lavabos, consolas, piezas de acento etc. Una tendencia que siempre es bien vista es colocar las piezas integrales para crear el efecto "book match", creando espacios únicos.

Gio Duarte. Fotografía: Juan Martín, para Casa Decor

 

La piedra natural la aplico en la mayoría de los diseños que realizamos en el estudio, ya sea que diseñemos un mueble bar, con una piedra que podamos retroiluminar, como encimera y paredes de la cocina (piedra natural tratada, para los ácidos), como en los suelos y paredes de un salón.

La función final donde vaya a ser aplicada la piedra o porcelánico, te indica cuál de las dos tiene mejores cualidades de interacción a medio o largo plazo. Cuando diseñamos un espacio, lo creamos para que acompañe a su dueño en su inversión, lo más que se pueda y que evolucione junto a él.

En la actualidad se está llevando mucho el colocar encimeras de porcelánico donde se muestre a simple vista dónde están los quemadores de la estufa, para este caso, la piedra natural, no tiene las características físicas, químicas, por el momento para soportar altas temperaturas por prolongados espacios de tiempo. En este caso el porcelanato es el rey absoluto.

El porcelánico también va bien, al momento de acompañar al diseño de mobiliario para las cocinas, si queremos colocarlo en las puertas de los armarios, ya que su poco espesor y peso, hace que no se maltraten las bisagras de las mismas.

Para los demás casos, la piedra natural es lo ideal, por su elegancia y durabilidad.

Lo bello de una piedra natural, es que te acompaña a través del tiempo, sufre cambios que le aportan calidez y nos cuenta cómo ha pasado el tiempo; nos hace reflexivos sobre nuestro paso breve por esta vida.

Mi piedra natural favorita son todas... Pero las piedras exóticas me pueden más. Un Ónix Rainforest Green o Red, incluso una ágata.

 

 

Guillermo García-Hoz, GUILLERMO GARCÍA-HOZ

He visto mucho acercamiento a las formas orgánicas y los colores que inspiran intimidad, que abrazan y espacios que te hacen sentir a gusto.

La piedra natural, como todos los materiales nobles, tiene cabida perfecta en cualquier estancia. Me gusta particularmente cuando tiene los cantos "matados" de manera irregular dejando ver la honestidad del material.

Guillermo García-Hoz

 

Si se puede por presupuesto y temas técnicos, en suelo y paredes y encimeras prefiero personalmente la piedra natural, pero también es cierto que para techos al pesar menos y no estar sometido a las cargas del paso ni traqueteo diario puede funcionar perfectamente

Mi piedra favorita es sin duda la Piedra Campaspero y el acabado cuanto más rústico, mejor.

 

Javier Páramo, DOSALCUBO

La piedra natural es un material que no pasa de moda. En un mundo cada vez más preocupado por el medio ambiente y la sostenibilidad, es tendencia en el interiorismo la vuelta a los materiales naturales, y a los proyectos ligados a la tierra. En este sentido la piedra natural suma su fuerte carácter, su expresividad y su vínculo con la tierra. Se huye un poco de las piedras y acabados tradicionales, creándose nuevas texturas y despieces, y nuevas piedras de otras zonas.

En el reciente evento del que formamos parte, Casa Decor, eran muchos los espacios que apostaban por la piedra natural. Es tendencia las piedras retro iluminada, tanto en restauración y hostelería, como en vivienda, protagonizando no sólo posiciones habituales como encimeras y mesas, sino también suelos, paredes, cabeceros...

Helen Sánchez, David Moya y Javier Páramo. Fotografía: Juan Martín, para Casa Decor

 

Las estancias y aplicaciones donde más nos gusta aplicar la piedra natural son en zonas de exterior, encimeras, paredes singulares. La personalidad y expresividad de la piedra la hace idónea en nuestros proyectos para puntos singulares que queramos dotar de carácter.

Los porcelánicos tienen hoy en día infinitos acabados e imitaciones de todo tipo de material, logrando incluso materiales retroiluminables, suelen tener una más fácil aplicación y en comparación con piedras naturales de gama alta, pueden estar mejor de precio.

Pero no se puede comparar el carácter de la piedra natural con un porcelánico, por muy bien imitado que esté.

Recientemente hemos colocado una piedra Patagonia (cuarcita Brasileña) retro iluminada, que nos tenía enamorados, aunque es difícil decantarse por una sola, cada proyecto requiere de unas características, que hacen más idónea una u otra.

 

 

Sigfrido Serra, SINMAS ESTUDIO

En la actualidad estamos viviendo un momento en el que la piedra natural aporta mucha fuerza a los proyectos de interiorismo; existe una intención de “volver a lo natural”, sea en piedra caliza, pizarras, granitos, mármoles… o en cualquiera de sus formas, la piedra está más “viva” que nunca, creando las claves de la artesanía moderna, destinada a construir los espacios presentes y futuros.

Grandes arquitectos nos dejan constancia de ello: Peter Zumthor o Rafael Moneo “La piedra es la historia de la arquitectura”, nos dejan un legado y una cultura sobre este material, que inspira y conceptualiza los actuales proyectos.

La tendencia en el uso de la piedra es muy diversa, ya sea por los nuevos acabados resistentes, la capacidad de generar formas o volúmenes con los cortes o las nuevas aportaciones de tipologías, la piedra esta más de moda que nunca.

Sigfrido Serra. Fotografía: @Nuelpuig

 

Me encanta el uso de la piedra natural en baños, pavimentos, revestimientos y en cocinas. Considero que aporta elegancia y sofisticación a los proyectos de interiorismo.

Nunca me he atrevido a colocar en techo, pero es un reto que ya estoy trabajando en mi próximo proyecto.

La piedra la considero como una obra de arte que nos regala la naturaleza, por ello es digna de introducirla en cualquier espacio; empleando una buena iluminación y un control del entorno, es perfecta para dar personalidad y elegancia.

Es mucha la diferencia que aporta a un proyecto un porcelánico y una piedra natural, tenemos que saber seleccionar el perfecto material para el lugar apropiado; para ello a mis clientes propongo utilizar la piedra natural en revestimientos, pavimentos y lugares estratégicos, en mobiliario. Por otro lado, el porcelánico me aporta ciertas características a otros lugares donde se prioriza un uso más agresivo, aunque tengo que confesar que ya no sólo el mármol aporta ciertas características de resistencia a través de sus acabados y tratamientos, tenemos también granitos, que cumplen de por sí, con esas características y son perfectos para nuestros proyectos.

Me encanta el Mármol de Macael, aparte de por ser un mármol procedente de España, y con todo lo que significa: sostenibilidad, made in Spain, apoyo al comercio local… su totalidad blanca la hacen para mí una piedra atemporal para toda la vida y que enriquece mis proyectos, ¡La perfecta herencia del Oro Blanco!

Aunque también me considero fan del Negro Marquina, Patagonia o el Travertino; son un acierto seguro para cualquier proyecto.

 

 

Daniel Pérez y Felipe Araújo, EGUE & SETA 

Siendo la piedra natural, natural y habiendo llegado al mundo antes que nosotros, parece casi increíble que, a estas alturas, no haya agotado por completo su capacidad para transformarse y sorprendernos. Lo cierto es, por el contrario, que debido a su inaparente maleabilidad y, por qué no, gracias a nuestros gustos siempre cambiantes, la piedra natural encuentra siempre una nueva manera de colarse en la foto de nuestros paisajes construidos, sean estos nuestras casas, nuestras oficinas o los sitios a donde acudimos para comprar, compartir o a desconectar. Hablando estrictamente de lo muy actual, quizás haya que destacar la actual disociación entre el colorido considerado como tradicionalmente “pétreo” con la amplísima gama de colores que la industria de la piedra natural ha puesto, en los últimos años, a nuestra disposición para el revestimiento de superficies de la más diversa índole. Con patrones de grano y veta cada vez más dramáticos, unos verdes profundos, los azules hipersaturados y esos rojos intensos que antes sólo podíamos ver engarzados en monturas metálicas y objetos de orfebrería, hoy se nos ofrecen en planchas perfectamente mecanizadas y aptas para su instalación estandarizada.

 

Daniel Pérez y Felipe Araújo. Fotografía: Juan Martín, para Casa Decor

 

Quizá no sea del todo demagógico decir que no existen más fronteras para la aplicación de la piedra que las que el presupuesto impone. No hay una habitación de la casa que las proscriba o que no pueda beneficiarse de sus atributos de durabilidad, riqueza textural o colorido. Dicho esto, es innegable que su tolerancia a la humedad la hacen particularmente conveniente para el revestimiento de exteriores, cocinas y cuartos de baño dentro de la vivienda, aunque nadie nos prohíbe que proyectemos mesas, chimeneas, butacas, cabeceros, estanterías o puertas revestidas en piedra, desde que las limitaciones que suponían el peso y el grosor del material ha sido reducido a su mínima expresión sin sacrificar, por este motivo, su resistencia. 

Partiendo de la base de que ambos materiales (piedra natural y porcelánico) son tremendamente resistentes, durables, prácticos y estéticamente versátiles, bien podría decirse que el porcelánico, al ser un producto manufacturado, es un revestimiento aún más duro, estable, económico y fácil de mantener que la piedra. Por su parte, la piedra natural sería la alternativa más exclusiva, agradecida al tacto y sostenible.

Ni siquiera lo muy favorito podría encajar bien en todos los ambientes, gustarle a todos los clientes o ajustarse a todos los presupuestos, por eso hace años dejamos de invertir tiempo en elegir predilectos y preferimos, a propósito de cada proyecto, encontrar el material, el colorido, y el patrón que mejor responde a todas estas variables. Eso no quiere decir, por supuesto, que el granito sodalita, por ejemplo, no nos parezca una auténtica y azulada maravilla o que el Onix Rainbow no sea una locura.

 

 

 

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