Escaneado con láser de superficies deterioradas para restauración

Richard Watzke

 

Por primera vez en Europa se está usando una nueva tecnología en un castillo barroco en Aurolzmünster, en Austria. Se combinan las nuevas y las viejas partes de una escalera sin necesidad de quitar el material original.

Las reconstrucciones en los trabajos de restauración de piedra a menudo emplean fragmentos del material original. Para poder combinar correctamente las piedras viejas con las nuevas, la superficie deteriorada de las partes viejas se retira para obtener una superficie limpia para una optima unión de las piedras. En este proceso es inevitable destruir una parte del material histórico. La preservación moderna de edificios y monumentos históricos trata de evitar la destrucción de estas históricas piedras.

En el castillo barroco de Aurolzmünster en Upper Austria se ha inventado una nueva tecnología para conservar tantas piedras históricas como sea posible durante la restauración de los pasamanos de la escalera central. En una joint venture, dos canteros de piedra, Norbert Kienesberger de Grieskirchen y Erich Reichl de Salzburgo, han reconstruido la escalera de varios pisos con pasamanos, combinando la más sofisticada maquinaria con un meticuloso instinto para un cuidadoso trabajo de restauración. Norbert Kienesberger se ha autoespecializado en el trabajo con moderna maquinaria CAD-CAM, Erich Reichl trabaja como restaurador de piedra en Salzburgo (Austria). Tras un periodo de planificación de seis meses, comenzaron a trabajar en el verano de 2003. La recostrucción se terminó en septiembre de 2004.

La historia

En 1705 se construyó la escalera usando dos mármoles austriacos: Schwarzenseer y Adneter Scheck. Debido a una disputa por la herencia en el año 1920, los antiguos propietarios del castillo quitaron las columnas, los pilares y los pedestales, incluidos los pasamanos barrocos de mármol, y los reemplazaron por balaustradas hechas de tableros de madera. Un grupo de caras columnas con capiteles y pedestales también fueron reemplazados por pilares de madera. Tras desmontar parte de los pasamanos y la balaustrada, los almacenaron de cualquier manera en un establo, muchas otras piezas se utilizaron en edificios de los alrededores. Tan sólo un montón de fragmentos permanecieron en el castillo. Considerando la importancia del castillo, las condiciones en las que estaba la escalera, en ese estado provisional, no eran satisfactorias para el actual propietario. Buscando una solución apropiada, se propuso poner un nuevo pasamanos de hormigón. Otra sugerencia fue usar mármol italiano. En ese momento se llamó a Norbert Kienesberger y a Erich Reichl para que buscaran una solución. Tras presupuestar los gastos y hacer un estudio de viabilidad, decidieron reconstruir el pasamanos usando el mayor número posible de las piedras históricas sin perder el material original de los fragmentos. Como modelo para el diseño se usó una fotografía de 1900.

La idea fue tratada con las autoridades de la preservación de edificios históricos e intentaron mantener las superficies dañadas de los fragmentos en lugar de cambiarlas para una mejor unión. Las intersecciones entre las partes viejas y las nuevas deberían hcerse con una tolerancia de menos de una décima parte de un milímetro haciendo uso del escáner con láser y de maquinaria de control numérico. Erich Reichl llamó a este método “Escaneado Digital de Superficies Dañadas”. Durante mucho tiempo quisieron llevarlo a cabo en un proyecto de restauración. Norbert Kienesberger era el socio ideal ya que poseía los conocimientos técnicos del centro de trabajo multi-axial con escáner de láser. Hay que señalar que Kiesnesberger es el arrendatario de la cantera de mármol Schwarzensee, de la que se extrajo parte de las piedras originales.

El transcurso del proyecto

El proyecto comenzó con un rompecabezas, ya que se llevaron al taller de Erich Reichl en Salzburgo todas las piezas y fragmentos para ser organizadas y medidas como es debido. Los resultados se recogieron en un plano CAD. Un tercio de la balaustrada se había perdido. Aproximadamente quedaba un 30% de la balaustrada, pero en malas condiciones. La piezas habían sufrido fracturas durante el desmontaje y, sobre todo, debido a los inapropiados métodos empleados en el transporte y almacenaje de las piezas. Otro 30% de la balaustrada correspondiente a la parte central estaba pero sin los capiteles ni los postes. Todas estas fueron las piezas en la que se aplicó el Escáner Digital de Superficies Dañadas. Las columnas con casi todos los capiteles y postes aún existían. Un enorme pilar fue encontrado más tarde. Varias piezas de la escalera y de la balaustrada habían sido usadas en edificios de los alrededores de Aurolzmünster y no pudieron usarse en la reconstrucción, pero sí que se pudieron usar como modelo para la reconstrucción de las partes nuevas.

 

Durante todo el proyecto tuvo la máxima prioridad el uso de todos los fragmentos existentes y la combinación de las piedras viejas y de las nuevas sin que apenas sufrieran pérdidas en la piedra original. A pesar de la inevitable pequeña diferencia de color entre las partes viejas y las nuevas, las partes nuevas encajan armónicamente en el aspecto del conjunto general de la escalera. Una gran ventaja fue que las dos canteras originales están aún funcionando. Por ello se pudieron encontrar bloques que encajaban en cuanto al color y la textura de las piedras originales.

Ajuste de las superficies dañadas

En su taller, Nobert Kienesberger escaneó todas las superficies con un escáner de láser en un centro de trabajo de control numérico de Breton. El mayor énfasis se puso en la calidad de los perfiles de los fragmentos. Como las piezas tenían que ajustar perfectamente, Kienesberg le puso una tolerancia al escáner de 0’3 milímetros. Kienesberg apuntó con una mayor precisión el escáner en las áreas perceptibles de las superficies dañadas que en el medio de las superficies. Después los datos obtenidos al escanear se procesaron en el ordenador. En primer lugar, hubo que reducir a un tamaño razonable la enorme cantidad de datos obtenidos. Para ello inventaron un programa especial. En el siguiente paso las partes internas de las superficies fueron movidas hacia atrás un milímetro con el nuevo programa, para obtener, de esta forma, el especio necesario para el pegamento.

Resumen

Erich Reichl dijo que la nueva tecnología fue aplicada con éxito. Para él, el campo de aplicaciones de esta tecnología puede ser en columnas dañadas en el exterior o en trabajos de restauración en los suelos de las iglesias. En cuanto al alto coste, éste depende de la situación en particular del monumento o edificio. Puede ser de gran ayuda especialmente en la restauración y conservación de edificios históricos y monumentos, ya que en este campo el uso de los materiales históricos y la conservación de los fragmentos originales es muy importante.

Dirección de la “Arbeitsgemeinschaft Stiegenhalle Schloss Aurolzmünster“

Erich Reichl GmbH.
Geroldgasse 25. 5026 Salzburg.
Tel. (+43 66 2) 63 34 54
Fax (+43 66 2) 63 34 54 33
reichlstein@aon.at

Norbert Kienesberger GmbH & Co KG.
Au 15. A-4707 Schlüßlberg.
Tel. (+43 72 48) 62 48 6
Fax (+43 72 48) 68 29 5
kienesberger@aon.at

Todas las fotografías: Erich Reichl, Salzburg y / and Norbert Kienesberger, Schlüßlberg, Austria.